Índice

· 01 · 02 · 03 · 04 · 05 · 06 · 07 · 08 · 09 · 10 · 11 · 12 · 13 · 14 · 15 ·
· 16 · 17 · 18 · 19 · 20 · 21 · 22 · 23 ·

domingo, 27 de abril de 2008

IV

Shadow tarareaba una canción perdida en algún lugar de su cerebro mientras revisaba atentamente en el ordenador de su despacho cualquier noticia sobre los dos hermanos conflictivos que se autoproclamaban líderes del sector Omega. No tardó mucho en encontrarlas:

Guns y Hate Morrigan, por algún motivo ese nombre no le era desconocido del todo, duda que se aclaró al contemplar una foto en la que salian ambos vestidos de científicos... Unos jóvenes bastante prometedores en la industria biogenética, desarrollaron mas de una decena de vacunas completamente revolucionarias que salvaron a la ciudad de mas de una epidemia, e incluso llegaron a desarrollar fórmulas de mejora genética mediante manipulación de células madre. ¿Qué diablos hacían una pareja de burgueses forrados de dinero hasta la epidural como ellos liderando una rebelión entre la escoria número uno de la ciudad? Shadow continuó revisando noticias, hasta que encontró un titular del periódico "Nexus Gazette" de hace unos 2 años que anunciaba:

"EL GOBIERNO DE SCHULZ CANCELA TODO EL APOYO A LA INVESTIGACIÓN CON CELULAS MADRE DE LOS HERMANOS MORRIGAN".

Ayer, en un comunicado de prensa oficial, el Comandante Vondarf, portavoz oficial del partido imperial dirigido por Arles Shculz, anunciaba la retirada total de presupuesto al Laboratorio de Investigación Bioética Morrigan S.A. Al parecer, los dos directores del Laboratiorio Morrigan (Los archiconocidos hermanos Hate y Guns Morrigan, cuyas investigaciónes excéntricas ya han provocado la ira de multiples miembros importantes del Vaticano) atentaban contra el principio de no-alteración genética de fetos, en busca de un remedio para el cancer de su madre, Louise Morrigan. El Santísimo padre en persona mandó un comunicado ordenando que se clausurara cualquier aportación económica a su investigación, y fueran destituídos de su puesto... [Mas en página 2]"

Shadow comprendió calladamente al pasar a la siguiente notícia, que no era sino una esquela con el nombre de Louise Morrigan y una simple marquesina que anunciaba "D.E.P". Comprendió que sería totalmente imposible adivinar cualquier tipo de poder sobrenatural que tuvieran los dos hermanos hasta llegar al Sector Omega, pero ya se hacía una idea de a lo que se iban a enfrentar... Manipulación genética.

Tomó un pequeño trago a la copa de líquido rojo que reposaba junto al portatil y procedió a reflexionar acerca del personal que debía llevar a la misión. Al tratarse de una misión clasificada como de dificultad B llevar a muchas personas no sería mas que una inutilidad, sabía que no debía contar la cantidad, sino la calidad, así que llevaría a los mejores. El iría, pues sabia que era uno de ellos, y no desaprovecharía por nada semejante oportunidad para desentumecer sus huesos agarrotados por la inactividad. - Veamos... ¿A cuantos mas llevaré? - Murmuró mientras miraba al techo recostado en el sillón a la vez que daba vueltas con el dedo meñique al contenido de la copa. Dos hermanos... Un miembro de Requiem para los dos, otro para los refuerzos y otro para vigilar la huida... Tres serían mas que suficientes, pero no tres cualquiera... Se lamentaba, pero iba a tener que requerir los servicios de ese puritano imbecil que siempre iba vestido como un modelo cutre de pasarela... Nunca confesaría que era realmente útil en un combate complicado, aunque no cabía duda de que así era. El hecho de ser un fanático enviado por la iglésia, sumado a algun comentario aislado que se le había escapado a Álex sobre lo atractivo que podía llegar a ser, bastaban para que Shadow no le tuviera mas respeto que el demostrado a una de las multiples ratas que habitaban en los subterranos del edificio.

Convenciéndose a si mismo de que no había mas remedio que hacerlo, se levantó apurando su copa y abandonó su despacho, bajando un par de plantas y recorriendo un angosto pasillo hasta encontrarse delante de una puerta totalmente blanca con un letrero rojo que anunciaba: "Nuca"

Con un prolongado suspiro, aspiró hondo y llamó a la puerta.

Relato originalmente escrito por Mephisto.

No hay comentarios: